lunes, 20 de enero de 2014

Estado "licencia": balance semana uno

Si de balances se tratara, este es altamente positivo. Casi que ni yo puedo creerlo. De mi listita inicial ya puedo tachar varias cosas. Y, por supuesto, agregar nuevas.

Vamos a ver:


- Fui a la peluquería, me hice color, pies y manos (antes del nacimiento tendré que volver: las canas crecen a un ritmo más acelerado que el de los kilos)
- Tuve un encuentro con amigas (faltan varios más)
- Tuvimos salida solos con marido y aguanté estoica las 3 horas de película un viernes a las 22.30, sin dormirme ni hacerme pis.
- Arranqué (y acabo de terminar y entregar: ¡Síiiii!!!) el trabajo del posgrado. Eso es un poroto enorme. Casi que me podría dar por hecha y tirarme a dormir.
- Hice electro, análisis de sangre, ecografía, primer monitoreo, visita a la partera y varios etc. médicos. Todo esto continuará indefectiblemente durante un tiempo.
- Fui a yoga y a masajes (lo más top de todo, los masajes, deberían continuar al menos durante todo el año para que el balance 2014 sea altamante positivo)
- Dormí un par de siestas (este punto deberá ser seguido con insistencia durante todos los días que quedan, o casi todos).
- Empecé a preparar bolso, bolsito, moisés, cochecito, recuperar cosas del otro niño, buscar en bauleras y cajoneras y esas cosas.
- Terminé dos libros que tenía empezado. No voy a engañar al balance. Mi lista inicial decía leer dos libros enteros. Así que arrancaremos hoy mismo.
- Vamos por la segunda temporada de Breaking Bad (con un ritmo de padres sin hijos que me sorprende a mí misma) y tengo unas 4 películas para ver. Hoy, sale la primera.
- Y, como verán, estoy escribiendo en este blog. 

Como les decía, primera semana. Balance positivo.

sábado, 11 de enero de 2014

Viajes, planes y listas

En los últimos días no dejo de leer estados de Facebook y tuits de amigos y/o conocidos que comparten sus armado de valijas, planificaciones de viajes, cuentas regresivas, fotos en orillas bonaerenses o haciendo check-innes y cosas por el estilo.


Mi estado de 36 semanas obligó a un verano en Buenos Aires sin plan de viajes a la vista. Así que esta tarde, mientras intentaba dormir la siesta, decidí que para no amargarme haría mi propia lista de planes para mi licencia, que empieza en tres días.

Tal como cuando uno piensa vacaciones las expectativas son altas, demasiado creo. Vamos a ver cuánto de todo esto logro cumplir. Por ahora, me cae bien hacer la listita y jugar un poco a que yo también planifico el viaje. No les voy a subir fotos y comentarios de todo, pero sepan que la lista se viene tupida:

1- Ir a la peluquería. Hacerme color, pies, manos.
2- Buscar asiduamente a la criatura a la colonia.
3- Dormir largas siestas con Vicente.
4- Lavar (hacer lavar, por supuesto) las cortinas de la casa, las cosas del moisés, las sabanitas y todo eso que hay que hacer. Comprar un mueble para el baño, acomodar la pieza, etc., etc., etc. (el síndrome de anidamiento también me toca)
5- Caminar, al menos, 3 veces por semana, siempre que el verano me lo permita.
6- Leer, al menos, dos libros enteros, que probablemente sean los últimos dos en mucho tiempo.
7- Hacer, al menos, dos salidas solos con marido, que también serán probablemente las últimas dos en mucho tiempo.
8- Escribir y entregar el trabajo parcial de un posgrado virtual que estoy haciendo.
9- Escribir y alimentar, lo más que pueda, este blog.
10- Escribir cosas varias de proyectos varios.
11- Avanzar con la escritura del libro de familias ensambladas.
12- Desayunar, almorzar, merendar, cenar con amigas en horarios bien laborales.
13- Ir a yoga, a la psicóloga y esas cosas de la vida diaria.
14- Hacer todos los veinte mil estudios, monitores, autorizaciones y cosas médicas de las últimas semanas.
15- Y finalmente parir.

Seguramente, después necesitaré un descanso. Pero bueno, en definitiva, eso mismo me pasa todos los veranos cuando vuelvo de las vacaciones.