lunes, 19 de noviembre de 2012

El modelo SSHM (soltera con separado con hijos mayores)

La soltera que se enamora de un separado con hijos mayores se cree una privilegiada. Claro, el hijo/a es grande, ya tiene asumida la separación de los padres, no pasa tanto tiempo en casa y hasta puede ser que se ponga contentísimo de que el padre esté de novio y lo deje un poco tranquilo.
No quiero ser mala onda chicas pero sépanlo: la alegría se terminará pronto. El hijo mayor de padre separado es, generalmente, adolescente y si bien es posible que le importe poco la vida amorosa de su padre, también es cierto que eso será justo hasta el momento en que sean ustedes las que se enamoren de sus padres. Tal vez vaya poco a la casa que ahora tienen en común, pero cuando vaya hará, por supuesto, vida de adolescente. O sea, dependiendo de la edad, habrá que ir a buscarlo a las fiestas y suspender las salidas de los sábados, aguantar a los amigos vaciando la heladera mientras hacen el trabajo en grupo o  riéndose pavotamente en el cuarto, y retrasar los almuerzos de domingo porque el nene no logra sacar la cabeza de la almohada después de la fiesta de anoche.
Además de todo con hijos adolescentes en la casa, y sobre todo si no son tus hijos, habrá cantidad de cosas que tener en cuenta. Por ejemplo: ponerte siempre una remera arriba del pijama de verano antes de salir de la pieza, salvo que quieras que elhijomayor o alguno de sus amigos te vea medio en bolas, golpear muchas veces la puerta antes de entrar al baño, chequear bien la heladera antes de la cena para no encontrarte con la sorpresa de que el nene/a o sus amigos se hayan ocupado de vaciarla.
En  fin, que aquella supuesta independencia que el hijo mayor parecía asegurar, es solo una ilusión. Y tengan cuidado, la cosa puede ponerse brava cuando esta feliz pareja enamorada decida tener hijos en común. "Fulanito lo va a adorar, si ya es grande. Hasta nos va a ayudar". No señores, el hijo por más mayorcito que sea, es hijo. Y sobre todo si es adolescente está preparado para contradecir, criticar y desaprobar la mayor parte de las decisiones de sus padres. Y un último detalle... planifiquen muy bien las vacaciones. No sea cosa que una vez que hayan pedido los días en el trabajo y alquilado la cabaña frente al mar, llegue la peor de las noticias. El hijo adolescente se lleva materias a marzo.

domingo, 4 de noviembre de 2012

Primer modelo: SSCH (solteraconseparadoconhijos)

Nada hacía pensar que después de una larga relación, unos cuántos años posteriores de soltería, independencia económica y cotidianeidad de soltera palermitana con las cosas re claras, me iba a enamorar de un recién separado con dos niños pequeños. Pero, tampoco, nada hacía pensar que eso no iba a ocurrir. Pasó. De la manera menos esperada y hace casi 5 años nos encontramos sin estar buscando (ni buscando, ni buscándonos) y lo que pareció solo una charla acerca de los conocidos en común (incluído mi ex), de cuestiones del ambiente laboral compartido y sobre todo de su separación, se convirtió en muy poco tiempo en una nueva familia.
Cabe aclarar que después de casi 10 días del primer encuentro nos volvimos a ver y que, más allá de cierta atracción inicial, nunca hubiera pensado que un recién separado iba a ser el inicio de una nueva relación. Y no porque tuviera algo contra los separados, claro está. Pero si bien yo estaba muy segura y feliz con mi situación de soltera profesional independiente de 35, también tenía claro mi deseo de volver a enamorarme y de formar una familia.
Pero más allá del "final feliz" vayamos a lo concreto. Cuando una es soltera y tiene tiempo libre para salir, para viajar, para decidir -medianamente- cada día de su vida, el combo "novioconhijos" puede llegar a ser explosivo.
Durante el primer tiempo hay que acostumbrarse a que hay días de padre con niños y esos días, obviamente, no se comparten. Básicamente al principio de la relación cuando todavía no se hicieron las presentaciones correspondientes.
Eso que podría parecer una desventaja, tiene muchos puntos a favor. Son los días en los que una fija determinadas actividades, sale con amigos o simplemente el día de tirarse en pijama a las 8 con el control remoto. Aunque claro que cuando justo ese día es el cumple de tu amiga, la fiesta de no se qué o el día que toca la banda que más te gusta, eso que hasta ayer super ventajoso, se convierte en "una porquería, al final no se puede contar con vos, yo no sé para que estoy de novia si tengo que ir sola a todas partes..."
Levante la mano la soltera con separado con hijos que no haya dicho eso alguna vez. 
Pero la calma vuelve y las semanas pasan y no se preocupen amigas que, cuando todo esté otra vez en equilibrio, llegará indefectiblemente, el momento de conocer a los chicos. O peor aún, llegará el momento en que también tendrán los propios y desearán con todas sus fuerzas volver a esos apaciguados días de soltera en que el novio separado salía con sus hijos. 

Se viene, se viene...historias de ensambles

Me gusta el título. Familias ensambladas. Me gusta más que el de familias reconstituidas, nuevas familias o familias afines.
El ensamble tiene lo suyo. El que más me gusta es el musical: "dos o más personas que a través de sus instrumentos musicales o de la voz transmiten una interpretación propia de obras musicales pertenecientes a diversos géneros y estilos".
Me parece que la definición de wikipedia nos cabe a casi todas las familias en realidad, pero sobre todo a las ensambladas que según las últimas estadísticas, somos más de medio millón.
Y está bueno eso de pensarnos como ensamble, como unión de personas distintas que con voces e instrumentos diferentes arman nuevas composiciones en multiplicidad de estilos, formas, etc.
Lejos ya de aquel modelo  que representaba la comedia ochentosa de Rodolfo Bebán y Silvia Montanari -se ve que yo tenía el gen del ensamble, porque mirá que andar siguiendo esa comedia...-, en la que dos viudos con hijos ya grandes -3 mujeres uno y 3 varones la otra- se enamoraban y arrancaban una nueva historia; las múltiples y diversas historias de ensamble de nuestros tiempos, no suelen tener origen en la viudez, sino casi siempre en el divorcio o separación de uno o los dos miembros de la nueva pareja.
Ni tampoco el modelo de "Los tuyos y los míos" -así se llamaba esa serie- con hijos de ambos lados, es el único o el más extendido.
Para ensambles hay de todos lo gustos y colores, de todos los géneros y estilos. Solteros/as que se unen a separados con hijos y tiene además, hijos en común; separados con hijos que se juntan para no tener más hijo; otros que una vez ensamblados siguen procreando, viudos y viudas, con o sin hijos, solteras/os que se juntan con doblemente separados y que suman hijos de cada una de sus separaciones. Pero además, separados recientes, separados hace años y con hijos grandes, separados con hijos chiquitos, separados...y todos vueltos a juntar.
Del medio de millón de familias ensambladas que señalan las estadísticas, un alto porcentaje está cerca mío. No sé si es que los ensamblados nos amontonamos o si los círculos en los que me muevo tienen "altas tendencias genéticas de ensamble" pero lo cierto es que entre mis amigos, familiares, compañeros de trabajo y amigos de amigos tengo cientos y cientos de ensambles diversos con historias tan disímiles como parecidas.
No se asusten amigas que este anecdotario las dejará en el anonimato, pero sus historias, las compartidas en almuerzos de trabajo, en charlas casuales, en profundos debates sobre los pro y los contra, etc. etc. etc., serán parte de este espacio. No se preocupen. Empiezo por mí.